¿Por qué nos comparamos con los demás?
Explica brevemente por qué tendemos a compararnos y cómo este hábito puede influir en nuestra autoestima y bienestar emocional. Destaca el papel de la sociedad y las redes sociales en este comportamiento.
Nunca me cansaré de repetir que vivimos en sociedad y que en cierta parte ‘’dependemos’’ de los demás, ya que nuestros trabajamos precisan de clientes y nuestra vida de una comunidad con la que cooperan, léase familia, amigos, conocidos, pareja, hijos.
Pero esto junto a que, a día de hoy, con las redes sociales y que internet está metido hasta el tuétano, de manera figurada, claro, hace que tengamos cierta tendencia a compararnos con personas que cuentan con la vida que, a priori, nosotros soñamos. Nos comparamos con personas que han ido con nosotros a la escuela, que tengan nuestra edad, nuestro trabajo. Es como que ‘’necesitamos’’ ver qué hacen los demás o cómo les va para analizar cómo estamos nosotros. Entiendo el impulso por esto, pero quizás el problema venga cuando por compararnos perdemos el foco y la perspectiva de nuestra vida. Ya que nos convertimos en la metáfora del burro y la zanahoria.
Las consecuencias de la comparación constante
Habla sobre cómo la comparación excesiva puede generar sentimientos de frustración, insatisfacción y baja autoestima. Menciona cómo puede afectar la motivación y la percepción personal.
Cuando nos comparamos de manera excesiva pueden tocar a nuestra puerta sentimientos de frustración, insatisfacción y baja autoestima, entre otros. Naturalmente esto nos afectará a la motivación y a nuestra percepción personal, debido a que la comparación constante parece no tener fin, siempre hay algo que nos falla y con lo que no estaremos contentos nunca, ya que parece que nos ha picado la serpiente del inconformismo y en materia de darle vueltas a la cabeza y compararse, nunca hay suficiente.
La persona que está constantemente comparándose tiende a ver sus atributos más buenos como insuficientes o no tan importantes y en cambio, todo aquello que esa persona cree que le falta, cree que es algo vital y que hasta que no lo consiga, estará incompleta. Este tipo de persona suele sufrir mucho en silencio, ya que la maquinaria de la comparación constante puede ser eterna sino hacemos algo por pararla.
Identificando los factores que impulsan la comparación
Describe las razones comunes que llevan a la comparación, como la inseguridad, la necesidad de validación externa o los estándares sociales poco realistas. Ayuda al lector a reflexionar sobre qué factores están influyendo en su forma de verse a sí mismo.
Puede haber muchos factores, ya sabemos que cada persona es diferente, pero sí que es verdad que podemos encontrar variables comunes como pueden ser la inseguridad, la necesidad de aprobación externa o los estándares sociales poco realistas. De ahí la gran importancia de reflexionar acerca de cuáles pueden ser los motivos que nos hagan vernos de esa manera.
Cuando una persona es insegura tiende a analizar mucho como lo ven los demás, por eso pueden surgir las comparaciones, con la finalidad de ver cómo se comportan o que hacen los demás y nosotros mimetizar para que, dicho mal y rápido, puedan ‘’aprobarnos’’. Como comenté, también podemos encontrar personas que sobrepiensan y cuentan con estándares sociales poco realistas, donde la comparación es un arma de doble filo que siempre nos hace daño, ya que nos enfatiza en aquello que nos hace ver incompletos.
Cómo dejar de compararte con los demás paso a paso
Proporciona una guía práctica con ejercicios o estrategias para reducir la comparación y fortalecer la autoestima:
- Reconocer cuándo y por qué te comparas: Es bueno reflexionar acerca de cómo son nuestras comparaciones y de donde vienen. ¿Vienen acerca de nuestro físico, nuestro estatus, nuestras habilidades sociales? ¿Son comparaciones puntuales o todas oscilan sobre la misma temática?
- Reemplazar pensamientos negativos con una visión más objetiva: Muchas veces contamos con pensamientos negativos o poco agradables, debido a que después de tanto sobrepensar nos hemos acabado ‘’creyendo’’ aquello que pensábamos. Por eso, es fundamental acudir al psicólogo para que nos ayude a controlar nuestros pensamientos y nos ayude a establecer un marco de realidad.
- Definir tu propio concepto de éxito y felicidad: Tu sentido de la vida, tus razones para ser feliz y exitoso no tiene que ser las que vistes en el Reel de un influencer o las que leíste en un libro. Aprendamos a separar el grano de la paja y analicemos que buscamos y que queremos nosotros, sin compararnos tanto, ni dejarnos llevar por la corriente más imperante o popular.
- Practicar la gratitud por tus logros y cualidades: A menudo encuentro en consulta a personas que tienen una buena vida y unas buenas personas a su alrededor que se sienten desgraciados porque les falta algo en la vida, sin valorar todo lo bueno que ya tienen. Por eso es tan importante dar las gracias por lo que tenemos, que muchas veces no es tan poco como pensamos.
- Reducir la exposición a desencadenantes de comparación, como las redes sociales: Sé que parece imposible luchar contra el monstruo de las redes sociales e internet, pero se puede. Pueden vivir controlando las redes sociales y lo que ves en tu móvil. Solo que tendremos que tener una mentalidad fuerte y quitarnos esas manías de pasarnos tantos minutos perdidos viendo el móvil durante el día. En redes sociales la gente solo muestra su mejor cara o la cara que saben que le puede dar validación social en forma de like, comentario o responder una historia.
Manejando la comparación en situaciones difíciles
Ofrece ejemplos de cómo evitar la comparación en escenarios cotidianos como el trabajo, las relaciones personales o el ámbito académico. Explica la importancia de centrarse en el propio camino.
Más allá del teléfono móvil, en el mundo real, podemos encontrar situaciones difíciles donde aparezca la comparación, como puede ser el trabajo, las relaciones personales o el ámbito académico.
Estos entornos suelen ser en los que estamos metidos gran parte de nuestra vida, por lo que será importante aprender a desconectar de la comparación en la medida de lo posible, por nuestra salud mental, ya que se nos puede hacer eterno ese sufrimiento en el trabajo, con nuestros conocidos y en los estudios.
Aprender a centrarnos en nuestro camino hará que no nos distraigamos pensando que tiene mejor que nosotros otra persona y que nos centraremos en cómo podemos mejorar nosotros y en que hemos mejorado en comparación a nosotros mismos, tiempo atrás.
El impacto de la autoaceptación en la autoestima
Explora cómo cambiar la comparación por la autoaceptación fortalece la confianza y mejora la salud emocional. Explica que aceptar la propia evolución permite vivir con mayor satisfacción.
No estoy diciendo que seas conformista y que tragues con lo que hay te guste o no. Con esto quiero decirte que es bueno aceptar nuestra esencia, como somos. Si por ejemplo, mides 1.60 y te da mucho complejo como hombre, poca cosa podemos hacer a día de hoy para cambiar eso. Por eso, será importante aceptar esa condición que no podemos cambiar, y sabiendo esto, fortalecer nuestra confianza y mejorar nuestra salud emocional.
Al igual que si a día de hoy no tenemos cultura nutricional, podemos aprender. Si no contamos con cultura de estudios, también podemos aprender o lo que se te ocurra que podamos aprender, también hay cosas que no podemos cambiar. Y seguir comparándonos y bombardeando nuestra autoestima con algo que no podemos modificar, es un desgaste y una pérdida de tiempo, físico y emocional.
Ejercicios para reforzar la autoestima diariamente
Incluye actividades prácticas como escribir un diario de logros, practicar afirmaciones positivas o desarrollar hábitos que fomenten la confianza en uno mismo.
Te puedo dar miles de consejos exprés, pero lo más efectivo es que trabajes en tu desarrollo personal y que hagas actividades que potencien tu confianza.
¿Te cuesta hablar en público? ¿Te cuesta familiarizarte con la tecnología? ¿Nunca has hecho deporte en serio? ¿Siempre le has tenido miedo a empezar cosas nuevas?
Aquí tienes un par de ejemplos de cosas que puedes hacer para mejorar y que mejore tu autoestima. El crecimiento duele, ya que nos toca salir de nuestra zona cómoda y apechugar, pero es lo que hay. Si quieres autoestima de grandes niveles tendrás que crecer personalmente, enfrentarte a tus miedos y tener una mentalidad abierta al cambio. No hay más secreto, es fácil escribirlo en una entrada de Blog, pero sé que es altamente complicado. Pero para esto estamos los psicólogos, para ser tu mentor cuando no sepas.
Cuándo buscar apoyo profesional
Habla sobre la importancia de acudir a terapia o coaching si la comparación constante está afectando gravemente la autoestima y la calidad de vida.
Esto puede acompañarte toda tu vida si no le ponemos freno, ya que ese bombardeo emocional en forma de comparación destruye tu autoestima cada día, por eso es fundamental pedir ayuda y que un profesional, como es un psicólogo, te ayude a hacerle frente a este enemigo que se ha instalado en tu cabeza.
Hay tratamiento para esto, tenemos las herramientas adecuadas, podemos guiarte y asesorarte desde la experiencia, pero sí que necesitaremos de tu compromiso y de tus ganas de cambiar. Habrá días que no tendrás motivación y otros que sí, pero para eso estamos nosotros para guiarte por el camino de una autoestima sana y la paz mental.
La autoaceptación como un acto de bienestar personal
Cierra el artículo destacando que dejar de compararse es un proceso que lleva tiempo, pero que permite vivir con mayor tranquilidad y confianza. Refuerza la idea de que cada persona tiene un camino único y valioso.
Como te habrás dado cuenta, la comparación no tiene fin, nunca es suficiente y de cada cosa que hagas puedes seguir afilando el hacha de la comparación. Esto al final causa una pérdida de tiempo increíble, pero una vez aprendes a tener este control emocional, puedes vivir la vida con mayor tranquilidad y confianza.
Tú tienes tu camino, tu sentido de la vida, tus objetivos y ambiciones, está bien ver que hacen los demás, pero no te obsesiones con ello. Sé que esto te parecerá imposible, pero con trabajo y con ganas podrás volver a coger el control de tu vida y tener paz mental, que no es poco.
