La conexión entre la alimentación y la salud mental

La alimentación y la salud mental son dos hermanos siameses, separados al nacer, metafóricamente hablando. Nuestro cuerpo está totalmente relacionado, si estamos carentes de vitaminas nos sentiremos enfermos y esa sensación de debilidad nos afectará emocional y psicológicamente, por ponerte algún ejemplo. 

Y es que los alimentos que consumimos pueden impactar en nuestro bienestar emocional. Al igual que la evidencia científica ha demostrado que ciertos nutrientes y hábitos alimenticios afectan a nuestro estado de ánimo, la energía y la claridad mental. 

Por eso, nutrición y psicología vamos de la mano. 

 

¿Por qué lo que comemos afecta nuestra mente?

El cerebro guarda gran relación con el sistema digestivo, es más, contamos con ciertos alimentos que pueden influir en nuestros neurotransmisores, como la serotonina y la dopamina. Es tanta la relación que guardan que al intestino se le considera como el ‘’segundo cerebro’’ y este tiene un gran papel en la salud emocional. 

Cuando trabajo con personas que quieren abordar su crecimiento personal, el tema de la alimentación es fundamental, si quieres rendir en el gimnasio, dormir bien y tener una buena salud, que comas como toca será fundamental. Hace años, parecía que la nutrición y la psicología no eran tan importantes, pero cada día que pasa la gente se conciencia cada vez de las ventajas de esta unión y eso está genial. 

Nutrientes esenciales para una buena salud mental

En cuanto a los nutrientes que ayudan a una buena salud mental, encontramos que los ácidos grasos omega-3, las vitaminas B, el magnesio y los antioxidantes apoyan funciones cerebrales y reducen síntomas de ansiedad o depresión, entre otros. 

Pero al igual que insisto en que cuando estamos mal emocionalmente, debemos acudir al psicólogo, cuando nutricionalmente no tengamos un plan, seamos desordenados a la hora de estructurar nuestras comidas y tengamos objetivos que pasen por cuidar nuestra alimentación, ese será el momento donde nos toque acudir a un dietista-nutricionista. 

La figura de un dietista-nutricionista es fundamental para alcanzar una buena salud y un buen estilo de vida. 

Alimentos que mejoran el estado de ánimo

Por mencionar un par, podríamos decir: frutas, verduras, nueces, semillas, pescado y granos enteros, por ejemplo. 

Estos alimentos tienen un efecto positivo en el estado de ánimo e incluso estos alimentos ayudan a mantener la energía y contribuyen a una mayor estabilidad emocional. Pero vuelvo a hacer énfasis a lo explicado en el punto anterior, si tienes dudas acerca de la alimentación acude a un dietista-nutricionista, el sabrá como ayudarte en tu caso particular.

El impacto de los azúcares y alimentos ultraprocesados en la salud mental

No es que ahora haya una campaña en contra del azúcar por arte de magia, es que se ha demostrado que los alimentos ultraprocesados y el exceso de azúcar tienen un efecto negativo en nuestra salud mental, ya que aumentan nuestra fatiga, nos pueden hacer irritables y que esto aumente el riesgo de problemas emocionales. Estos alimentos pueden afectar el equilibrio químico del cerebro. 

Y sé que muchos diréis que hemos consumido azúcar y alimentos ultraprocesados desde hace años y que nunca ha pasado nada, pero esto es una falacia, pasar pasa, lo que ocurre es que puede que no cerca de tu entorno. Al igual que ocurre con el tema del tabaco y el alcohol, pero eso nos lo guardamos para otra entrada al Blog.

La importancia de una dieta balanceada y constante

Cuantos más estudios acerca de salud salen, más énfasis hacen estos en la importancia de una dieta balanceada y constante para apoyar la salud mental. 

Unos buenos hábitos regulares de alimentación nos ayudarán a sentirnos más fuertes, menos cansados y con energía para poder enfrentar las tareas que nos exija el día a día. En consulta veo que cuando una persona empieza a cuidarse, tanto mentalmente como nutricionalmente, mejoran en muchos ámbitos de la vida. Si antes aguantaban 20 minutos corriendo, ahora aguantan más. Si antes les costaba salir a caminar, ahora lo hacen con más energía y aguantan más. 

Y todo esto, te ayuda a que tú te veas mejor, más seguro, más fuerte y con más ganas por seguir mejorando. 

Consejos para mejorar la dieta y favorecer la salud mental

Te puedo dar consejos básicos generales, como decirte que evites alimentos ultraprocesados y que bebas suficiente agua, que incluyas alimentos frescos y variados y que también planifiques tus comidas para mantener una dieta constante. 

Pero el mejor el consejo, y me vuelvo a repetir, es que acudas a un dietista-nutricionista que sepa guiarte, que ajuste a ti el tratamiento y que te enseñe a comer de manera adecuada. 

Si quieres tener bien los dientes, tendrás que ir al dentista. Si te duelen los músculos, habrá que ir al fisioterapeuta. Cuando tengas problemas emocionales, ve al psicólogo. Y si no sabes que comer de manera saludable, tendremos que acudir al dietista-nutricionista.

La relación entre hidratación y salud mental

Cuando estamos deshidratados, esto puede causar en nosotros fatiga y afectar a nuestro estado de ánimo. El agua es fundamental en nuestro cuerpo, y como no, en nuestro querido cerebro también lo es. Por eso, será importante beber suficiente agua y consumir alimentos ricos en agua, como frutas y verduras. 

A veces no consumimos suficiente agua, porque no tenemos el hábito de llevar una botella de agua al gimnasio, en el maletín al trabajo o en la mesita de noche de nuestro dormitorio.

Cuando es necesario buscar apoyo profesional

Sí, ya te he dicho varias veces lo importante que es ir al dietista-nutricionista, pero cuando tengamos fallos en nuestra motivación, cuando tengamos problemas psicológicos derivados de algún problema de alimentación, es ahí donde entramos los psicólogos. 

Yo personalmente colaboro con varios dietistas-nutricionistas, para que cuando algún paciente mío de psicología lo necesite, tenga un buen profesional para asesorarle. El trabajo del psicólogo y dietista-nutricionista es transversal, ambos estamos en el mismo equipo, tu equipo. Y muchos casos se necesita de la supervisión de estas dos figuras de la salud.

Comer bien como un acto de autocuidado

Al final, todo se resume en estar bien, estar sano y sobre todo aprender a autocuidarse. Cuando adquirimos hábitos psicológicos que nos ayudan a estar mejor mentalmente y hábitos nutricionales que nos ayudan a tener una relación sana con la comida, encontramos que mejoramos en nuestra vida. Nos sentimos mejor, tenemos control emocional, estamos seguros y confiados en nosotros mismos. Y adquirir esta paz mental es un gran objetivo por el que luchar. 

Así que si estás batallando esta guerra y necesitas de un buen dietista-nutricionista y de un buen psicólogo, no dudes en pedir ayuda.